Toca territorio mexicano un fenómeno que es muy común durante primavera y verano, que es la nube de polvo, ocasionada debido a la escasez de lluvia y presencia de vientos intensos, lo que genera desprendimiento de aire cálido, seco y saturado de aerosoles y polvo.
Mediante modelos matemáticos se puede predecir su trayectoria, al parecer pasará sobre la Península de Yucatán y vertiente del Golfo de México, previendo una disminución en la formación de nublados y lluvia, incremento de temperatura, disminución en la visibilidad como cielo brumoso.
Se espera que su contenido continúe llegando sobre Campeche, Quintana Roo y posteriormente Tamaulipas, esto de dice por el monitoreo que se a realizado del Océano Atlántico y el Mar Caribe, en donde se ha presenciado una reducción de la visibilidad, afectación en la navegación marítima y aérea, lo que provocó un cielo brumoso.
Se contempla que la noche del viernes 26 de junio se desplace hacia el sur de Estados Unidos de América, para así, dejar de afectar al territorio mexicano.