El Dr. Rubén Macías Acosta, profesor investigador y actual jefe del Departamento de Economía del Centro de Ciencias Económicas y Administrativas (CCEA) de la Universidad Autónoma de Aguascalientes, encabeza un proyecto de investigación para analizar las afectaciones que ha tenido la crisis sanitaria por covid-19 en el empleo y la capacidad para generar ingresos que ayuden a cubrir las necesidades básicas de las personas.
El proyecto consta de evaluar la cadena exportadora con la finalidad de analizar los mecanismos bajo los cuales se generan empleos, tanto en empresas con actividad comercial internacional, como en negocios cuyo foco se centra en el ámbito local o nacional.
El académico de la UAA afirma que su investigación considera la forma en que la actividad comercial de las grandes empresas genera un flujo monetario que termina por verse reflejado en diferentes niveles, los cuales comprenden desde las empresas nacionales y extranjeras con una relación comercial directa, hasta los pequeños negocios que se benefician del poder adquisitivo que produce la propia empresa, a partir de la cual se genera la mayor parte del capital.
En este sentido, los estudios permiten identificar cuántos empleos crean las actividades exportadoras, por un lado, de manera directa en las empresas que se establecen y, por otro, de manera indirecta en las empresas que ofrecen productos y servicios, tanto a la empresa como a sus empleados, y permite calcular, por medio de un modelo, cuánto afecta a la economía local la pérdida de un empleo en una empresa exportadora.
Lo que el proyecto permite entonces, es analizar la vulnerabilidad de la economía local ante la desaceleración de consumo a nivel mundial que ha traído consigo la covid-19 para posteriormente formular propuestas fundamentadas en los datos arrojados en el entorno local.
En suma, señaló que es importante recibir inversión extranjera de empresas que se establecen en nuestro país; sin embargo, en un momento como el que vivimos, es prioritario impulsar empresas nacionales con la capacidad de satisfacer las necesidades comerciales de compañías dentro y fuera de la entidad para fortalecer el valor de la moneda, otorgándole también un peso mayor al poder adquisitivo interno. Esto a través de la diversificación de actividades comerciales y el establecimiento de regulaciones comerciales, como las impulsadas en Estados Unidos de América, que inciten la contratación de profesionales locales en puestos directivos de empresas extranjeras establecidas en México.