Por: Javier Arturo Torres
En este mundo altamente competitivo, muchas veces nos encontramos con este tipo de comentarios, ¡es un lugar caro!, cobran caro, etc., ¿pero que es caro para ti?, porque si te gusta ir a comer a los mercados y taquerías claro que vas a disfrutar de esa comida tal vez sea sabrosa pero consumirás en un día ordinario en el que no festejas ni celebras nada, porque por mucho que en los mercados disfrutemos ese sabor fritangero ¡jamás! Vas a comparar esos lugares con un buen Restaurante en donde vives una experiencia que aluda a tus emociones, a ese negocio en el que una persona o varios socios invirtieron un capital considerable, para que tú disfrutes una buen desayuno, comida o cena, en un lugar moderno, innovador, limpio y ordenado, para ser sinceros a nadie le gusta ir a lugares sucios y pasados de moda, pero hay veces que la necesidad te obliga a hacerlo.
Y entonces nos acordamos de esas frases “lo barato sale caro” “si buscas lo más» barato no exijas calidad”, “bueno y barato no entra en un zapato” y entonces te das cuenta que esas frases la hicieron personas que vivieron momentos desagradables.
No menosprecies tu trabajo, porque te ha costado sacrificio, experiencia y perseverancia, y tampoco es justo que vayas a regatear al marchante del mercado o al vendedor de artesanías, cuando “jamás” vas a ir hacer eso con una tienda de conveniencia o departamental, a un buen restaurante, una agencia de autos etc., tenemos esa mala cultura de hacerlo con los que menos tienen, si no ajustas no lo compres y si lo compras valora su esfuerzo y sacrifico de todo lo que esta atrás de su producto o servicio.
En este mundo “hay de todo y para todos” y los que estamos invirtiendo en un buen negocio para dar una excelente calidad en el servicio, no podremos hacer descuentos o rebajas, el precio que ofreces por X producto o servicio ya debió pasar por un análisis de cálculo para ofertarlo al consumidor final, y si tú haces descuentos o rebajas tendrás perdidas en tus ganancias y entonces venderás por vender, mas no por ganar.
Anécdota; nuestra empresa se dedica al mantenimiento preventivo y correctivo de vehículos de combustión interna gasolina o diésel, nuestro centro de servicio es moderno e innovador y nos manejamos con la metodología 5S, cuando vienen nuestros clientes se quedan asombrados de la limpieza que existe no solo en las oficinas sino también en nuestra área de producción, cuando tienes una excelente calidad en el servicio, esa será la mejor fortaleza para que tus clientes apuesten por tu negocio, “aquel cliente que se va por un mal servicio jamás regresara, pero el que se va por precio regresara porque en otro lado le dieron un mal servicio”.
“Innovar o morir” esa es la cuestión, tendremos que reinventarnos para atraer a nuestros clientes sin regalar nuestro trabajo, podremos hacer tarjetas VIP y regalarlas bajo ciertas normas y consumos de nuestros clientes asiduos, marcando una diferencia con un cliente no recurrente donde el cliente que nos prefiere se sienta importante, podemos regalar suvenirs que valgan la pena y que realmente sean útiles y a la vez sea una publicidad y mercadotecnia para nuestro negocio una buena taza, una pluma, unas barajas etc., dependiendo la compra que nos hagan.
No rebajes por rebajar, no regales por regalar, somos negocios que pagan impuestos como las trasnacionales y multinacionales, pagamos sueldos y seguro social como ellos aunque en un menor rango, hay que valorarnos, hay que valorar al artesano, al marchante de mercado, al mecánico, al albañil al obrero, porque tanto vale una profesión como un oficio.
Y la próxima vez que tú vayas a consumir un producto o un servicio y quieras regatear, ten empatía con tu vendedor refléjate en su espejo porque por muy humilde que sea ese negocio “no sabes el sacrificio que le costó a esa persona invertir en él”.
