“AL DIABLO CON LAS INSTITUCIONES, ES MAS AL DIABLO CON TODO”

Por EFRÉN MARTÍNEZ COLLAZO

Dicen que las frases no solamente son ideas fugaces que adornan el inicio de un discurso, sino que son pensamientos profundos de su autor, por lo regular las frases llevan implícitamente un mensaje de hacer o dejar de hacer algo. Sin duda alguna tiene que ver si el que la lee y la usa compra el mensaje que su autor quiso imprimir, es decir ninguna frase es mala sino se le da un sentido contrario a su naturaleza.

A lo largo de la historia de nuestro país se han vertido una serie de frases hablando del sector político, sin duda alguna muchas han marcado para bien el pensamiento de los mexicanos, otras en cambio han causado malestar por su poco o nulo aporte en beneficio colectivo. Existen algunas que provocan odio y polarización entre los ciudadanos, una de ellas que quedara para la postrimería será sin duda alguna la externada por el actual mandatario luego de que el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) ratificara el triunfo de Calderón Hinojosa, el entonces candidato derrotado López Obrador arremetió contra la decisión de los magistrados soltando su recordada frase ¡Al diablo con sus instituciones!

En la actualidad siendo ya Presidente de México, su polémica frase cobra mucho sentido, ya que como todos lo hemos presenciado el Presidente arremete constantemente contra las instituciones y organizaciones, sean nacionales o extranjeras, que se atrevan a criticar o hacer observaciones de su administración. Desde su llegada al poder lo que en un principio hasta causaba sonrisas hoy a casi el término de su periodo sus declaraciones y acciones causan pánico.

Y es que quizás pueda resultar chusco que un Presidente en una conferencia en vivo diga: “Fuchi Caca”, lo preocupante del asunto no es eso, sino lo que significa eso, el desdén por la clase privilegiada, por los conservadores, violentando la Constitución ya que el protesto ver por todos los mexicanos sin distingos independientemente que esa clase no pertenezca a su partido político. La exposición mediática que como ningún presidente ha tenido solamente le ha servido para dos cosas, una para mantener su popularidad en las encuestas y dos para atacar a sus enemigos políticos.

Así las cosas, lo que solamente se había quedado en frase, el pasado 18 de abril se trasladó en acciones concretas luego de que la Cámara de Diputados recibió una iniciativa del presidente Andrés Manuel López Obrador que plantea reformar diversas disposiciones de distintos ordenamientos, en materia de simplificación orgánica. Dicha iniciativa dice el autor: “Tiene por objeto racionalizar la estructura orgánica de la Administración Pública Federal (APF), con el fin de eficientar los recursos públicos, agilizar los procesos administrativos y aprovechar los bienes nacionales adecuadamente”. Dicho en palabras sencillas el Presidente busca desaparecer todo aquel órgano que huela al pasado.

Lo más alarmante de esto es que dicha reforma será un hecho al ser esta una reforma legal y no constitucional, dicho de otra forma, para su aprobación el Presidente solo necesita el voto de la mayoría de su partido y aliados, no así se tratara de reformar la constitución, ya que ahí ocuparía de los legisladores conservadores. Y es que no solo se trata de una reforma orgánica administrativa, el verdadero espíritu de esta es destruir instancias que le son incomodas al actual régimen, ya lo intento con el INE, ya lo está haciendo de facto con el INAI, lo pretende al menos con discursos con la Corte y así lo hará con esta reforma, y si no alcanzare, ya lo advirtió que será el testamento a cumplir para la o el próximo Presidente.

Su discurso de odio y de polarización alcanza niveles insospechados, para él la política es simple, o piensas como yo o eres mi enemigo, y así disiente de todos los periodistas que se atreven a señalar o criticar alguno de los muchos errores y desaciertos de su administración. Incluso ya ha habido lo que muchos traducen como una abierta amenaza a los periodistas, así lo consigno la siguiente nota:

El presidente Andrés Manuel López Obrador envió este lunes un mensaje a los periodistas que cubren las conferencias de prensa en Palacio Nacional.

…»El otro día vi con motivo de esta entrevista, vi a un columnista diciendo que los que venían aquí no eran buenos periodistas, que Jorge Ramos sí era buen periodista. Yo discrepo y creo que ustedes no solo son buenos periodistas, son prudentes porque aquí les están viendo y si ustedes se pasan, ya saben lo que sucede«, dijo…1

En su mundo maravilloso todo el que no está de acuerdo con sus políticas es porque sirve a los privilegiados, sin analizar como demócrata sus posibles errores o mejor aún sin comprobar las acusaciones hacia ellos, haciendo honor a aquella frase de Sergio Pitol: La mente totalitaria no acepta lo diverso, es por esencia monológica, admite sólo una voz, la que emite el amo y servilmente repiten sus vasallos.

Y es que el rencor que le produjeron dos derrotas presidenciales lo vierte cual veneno a una presa, en este caso su presa es quien no piensa como él. Siempre será dable debatir y discernir, pero siempre del marco del respeto y de la libertad, cuando se restringen estos estamos ante un estado totalitario, como ejemplos hay muchos en el mundo, ya lo vivió Cuba, y ahora nuestros hermanos latinoamericanos, sin contar por supuesto Corea del Norte, China y Rusia.

Al diablo con sus instituciones desgraciadamente no solo es eso, sino que la destrucción de estas lleva implícito el a diablo con todo lo que se oponga a mí, quizás la frase “EL ESTADO SOY YO” atribuida a Luis XV, haya existido o no, lo cierto es que traduce el más intenso y perverso sentimiento que puede llegar a tener un gobernante ante todo el poder detentado. La tentación es mucha cuando se ganó una elección con el apoyo de más de 80 millones de mexicanos, con la mayoría de ambas cámaras y con una intención del voto de cara a la próxima elección de más del 50 % del electorado… al tiempo.

1.- ARTURO RAMOS ORTIZ 16/04/2019 18:33 LA CRONICA.